El piloto del Citroën-Monster-ProCircuit Rally Team espera terminar la temporada con una destacada actuación en la Cuesta Chacabuco.
Con mucho optimismo llega Vicente Israel a la octava y última fecha del Campeonato RallyMobil 2017, prueba en la que espera meterse entre los tres mejores de la disputada serie R3.
Su entusiasmo viene alimentado por los buenos resultados alcanzados en el pasado Rally de Valparaíso, en la que puso fin a una seguidilla de malos resultados y sumó valiosos puntos (finalizó cuarto). “Mi aspiración para este rally es subir al podio que me ayudaría a borrar todos los problemas que enfrenté este año y que sólo pude aminorar con lo ofrecido en la competencia de Valparaíso”, dijo el volante del auto número 99.
Vicente Israel afirma que este resultado le sirvió para recuperar la confianza. “Exactamente, ya que tantos abandonos o accidentes en seis fechas consecutivos demostraban que había perdido el rumbo. Me presioné en exceso lo que me llevó a errar y cometer algunas fallas producto del momento que vivía y que se agudizaba cada vez más al no obtener resultados en cada fecha. Ahora con toda esta experiencia tengo muy claro cuál es mi ritmo competitivo y paulatinamente iré aumentándolo, subiendo las exigencias. Por ello que en este fin de semana espero dar un nuevo paso hacia adelante, aguardando que sea grande, ya que comprobé que puedo realizar los mismos tiempos del grupo de vanguardia, los que realicé en la jornada del domingo, lo que me dejó muy contento, satisfecho y muy entusiasmado”, señaló.
El mellizo también se dio el tiempo de hacer un balance de su compleja temporada. “Me sirvió para aprender, aunque fue duro ese camino, pero pude darme cuenta que debía enfrentar las competencias de otra manera, de menos a más. Ir un poco más lento, pero seguro. Me faltaba más experiencia para ir progresando paulatinamente y eso lo pude comprobar en la fecha pasada con mi cuarto lugar en la clasificación final”, aseguró.
Sobre el Motorshow, el volante del Citroën-Monster-ProCircuit Rally Team cree que la superficie asfaltada no será un inconveniente. “No creo que sea un mayor problema, ya que hemos tenido oportunidades de correr sobre piso asfaltado como aconteció en el Rally de Vicuña. Vamos a entrenar mañana con Benjamín y Samuel para buscar la altura adecuada del auto, el mejor punto de frenaje con los neumáticos y varios otros detalles para finiquitar la preparación en el shakedown del día viernes”, mencionó.
De cara a la próxima temporada, Vicente es optimista. “Las forma de enfrentar las competencias es diferente por ello que miro con mucho entusiasmo el próximo año. Aprendí que hay que correr en un ritmo seguro, sin tomar riesgos innecesarios, que con mayor experiencia voy aumentándolo, y una clara prueba de ello fue lo realizado en la fecha pasada, que me dejó muy conforme”, concluyó el piloto que en 2018 seguirá compitiendo en la R3 a bordo del Citroën DS3.