Durante el shakedown del Gran Premio de Valparaíso, realizado ayer en el sector Administración – Fundo El Rosario, conversamos con el piloto del Citroën Monster-Pro Circuit Rally Team, Vicente Israel, quien volvió a la competencia tras lesionarse el hombro mientras entrenaba para el Rally de Rancagua.
Antes de iniciar sus pasadas de prueba, el piloto del Citroën DS3 número 99 no ocultó su entusiasmo por estar de vuelta. “Estoy súper feliz de estar de vuelta y con muchas ganas de que parta el rally”, aseguró.
En cuanto a su lesión, el mellizo contó que aún no recibe el alta completa, pero que ya está habilitado para correr en rally. “Aún no me dan el alta al 100%, puedo correr en auto, pero todavía no puedo andar al máximo en moto y tampoco puedo entrenar en el gimnasio con peso. Puedo hacer de todo, pero livianito, sin peso. Más que nada como precaución”, aseguró.
A modo de entrenamiento para el Rally de Valparaíso, el martes el piloto volvió a subirse al Citroën DS3 y realizó pruebas en Laguna Carén. “Me volví a reencantar con el auto. Hace rato que no me subía y de hecho me volvió a sorprender la potencia que tienen estos autos”, afirmó.
Sobre su retorno a las pistas, Vicente Israel asegura que el objetivo es “más que nada disfrutar y reencantarme con el rally. Si al final no estoy peleando nada, pero si se da la opción de estar peleando arriba, feliz, y si es un podio mejor, pero la idea es pasarlo bien y más que nada enfocarse y estar con la mente puesta para el 2018”.
Además, de cara a la próxima temporada, Vicente Israel confirmó que seguirá en la R3, aunque la idea es que a mitad de año el equipo adquiera un Citroën C3 R5 (que se lanzará al mercado en esa fecha), el que quedaría en manos de su hermano Benjamín, mientras que Vicente se quedaría con el DS3 R5 que usará durante las primeras fechas su hermano. “Ya siendo DS3 o C3 me da lo mismo, mientras sea un R5, yo feliz”, concluyó el volante del Citroën Monster-Pro Circuit Rally Team.