Con siete años de trayectoria en el RallyMobil, Tomás Cañete es uno de los navegantes chilenos con mayor experiencia en la competencia tuerca y por ende voz autorizada para hablar del papel que tienen hoy en día los copilotos nacionales en el evento motorsport más importante del país.
El dueño de la butaca derecha en el auto de Emilio Rosselot en la categoría R3 destaca que durante el último tiempo se ha “reconsiderado” al navegante criollo después de un dominio de los argentinos en esta materia.
“Tenemos el caso de Sebastián Vera que está con Tomás Etcheverry (piloto) en la R5; la Javiera Román (navegante de Martín Scuncio en la R5) y Matías Leiva que va a correr con Mario Hart”, destaca.
De ahí que Cañete cree que “ya se está reconsiderando nuevamente al navegante chileno, estamos bien posicionados, creo que sería una bonita vitrina que todos los navegantes chilenos podamos terminar la fecha del mundial (en Concepción)”.
Las expectativas para este 2019
Este 2019, y al igual que el año pasado, Cañete será el acompañante de Emilio Rosselot en la categoría R3. Para este nuevo desafío, que inicia el 5 de abril en Los Ángeles, ambos protagonistas han realizado una dura preparación y más aún pensando en la fecha del WRC que se correrá en Concepción en mayo.
“Hicimos entrenamiento en Casablanca para luego ir al rally del Biobío. Participamos en ese rally para agarrar ritmo entre nosotros porque fueron alrededor cuatro meses sin hoja de ruta”, explica.
Pero además, el rally del Biobío sirvió para enfrentar nuevamente los caminos sureños que serán protagonistas en las dos primeras fechas del RallyMobil, incluyendo el WRC.
“Queríamos conocer el desgaste de neumáticos con esos caminos. Es cierto que no será el mismo clima, pero si no llueve o llueve poco nos vamos a encontrar prácticamente en el mismo suelo”, dice.
En ese mismo escenario, Tomás Cañete no esconde su felicidad por ser parte del Campeonato Mundial de Chile que se desarrollará entre el 9 y 12 de mayo en la ciudad de Concepción.
“Es raro lo que pasa en mí, pero nunca de los 18 años que vengo siguiendo el rally, he ido a ver una fecha mundial, ni siquiera en Argentina, por lo tanto para mí como navegante es un verdadero desafío”, sostiene.
El dueño de la butaca derecha reconoce que “serán varios días de carrera por lo que será un trabajo de concentración que nunca he tenido. Y también un desafío personal de estar en una carrera que vamos a tener que ocupar mucha estrategia”.
Por eso es que sus expectativas son altas y afirma que “queremos hacer las cosas bien, hay que correr el doble concentrado y trabajar directamente con el equipo mecánico”.