El piloto del equipo Joker, Felipe Rossi, analizó lo que ha sido su tercera temporada en la R2, donde pese a un inicio complicado, espera acortar distancias con los líderes y proclamarse campeón.
Las metas autoimpuestas por Rossi a principio de temporada eran ambiciosas, nada menos que quedarse con el título de la competitiva serie R2.
Sin embargo, durante las tres primeras carreras el piloto de Peugeot Sport Chile no ha logrado la regularidad necesaria para estar en lo más alto del ranking y actualmente marcha cuarto en la clasificación a 37 puntos de distancia del líder, Francisco “Chaleco” López. “Sinceramente este inicio no ha sido lo esperado. Yo me había trazado ser primero, aunque siempre estuve consciente de que iba a ser algo difícil, más que nada por el nivel de los rivales”, comenta el piloto.
“En Pichilemu me enfermé del estómago, entonces no pude correr el sábado porque estaba el riesgo de desmayarme. El domingo, cuando largué lo hice sin el freno de mano, entonces no he tenido fortuna”, explica. No obstante, Felipe Rossi aclara que cuando no ha sufrido inconvenientes, su rendimiento lo ha dejado conforme: “gané las etapas del domingo en Concepción y en Los Ángeles. Eso me deja satisfecho, por un lado”, dice.
De cara a lo que resta de campeonato, y pese a su lento arranque, Rossi se niega a claudicar en la lucha por el título: “Nada es imposible. Sé que “Chaleco” y Emilio (Fernández, segundo de la clasificación) están un escalón más arriba en puntaje. Es una gran diferencia, pero lo intentaremos. Nos queda salir a ganar con todo y enfocarnos al máximo en el rendimiento”, sentenció el piloto del Peugeot 208.