Benjamín Israel tuvo un fuerte despiste durante la etapa sabatina del Gran Premio de Frutillar y ahora ve peligrar su liderato en la R3.
Los trazados altamente técnicos y resbaladizos –producto de la lluvia- han demostrado ser un duro escollo para los participantes del Gran Premio de Frutillar.
Cuando recién transcurría la mitad de la jornada sabatina, ya se contaban siete abandonos, tanto por averías mecánicas, como por despistes. Sin embargo, hubo uno que captó toda la atención por su espectacularidad y relevancia para el campeonato: el de Benjamín Israel.
El piloto del equipo Citroën-Monster-Pro Circuit y actual líder de la R3, sufrió un fuerte despiste y volcamiento durante el primer prime del día.
“El piso estaba resbaladizo, muy traicionero. En la penúltima curva del primer prime del día, entramos pasados y, al frenar, el auto se bloqueó y descontroló, solté para evitar irnos de costado y volcarnos, pero encontramos un montículo, saltamos, caímos de punta y terminamos dando tres vueltas de campana. Fue el peor accidente que he tenido durante mi carrera en rally. El auto quedó completamente destrozado”, detalló Benjamín Israel, quien ahora ve peligrar su liderato en la categoría R3.
Pese a esto, el talentoso volante señaló que “así son las carreras, llenas de imprevistos. Mi navegante, Marcelo Der Ohannesian, resultó ileso y yo también, aunque con unas pequeñas molestias en la clavícula y la pierna izquierda, producto del golpe contra la jaula de seguridad”.
Accidente que afortunadamente, más allá del susto y los daños en el Citroën DS3, no tuvo mayores consecuencias para el binomio chileno-argentino, que ahora tendrá que empezar a pensar en el Gran Premio de Vicuña (1,2 y 3 de septiembre) para seguir en la lucha por el título de la serie más importante del Campeonato RallyMobil.
*Créditos de foto: Patagonia Racing