A sus 17 años Nicolás Bisquertt es un ejemplo digno de imitar. De trato amable y tranquilo se desenvuelve con soltura en su silla de ruedas, como si jamás hubiese ocurrido el accidente en moto que lo dejó parapléjico. Su temple sorprende a quienes conversan con él y conocen su experiencia. Nunca se ha sentido postrado, y menos que el mundo acabó, sabe que cada día es una nueva meta a superar. Su historia de vida ligada a los deportes extremos sorprendió a los participantes del RallyMobil, y el equipo Cerveza Valtor de Valdivia lo invitó a ser copiloto de uno de sus autos en el shakedow realizado en Pichilemu.
“Tenía sólo 13 años cuando ocurrió el accidente que me dejó en silla de ruedas”, recuerda Nicolás con un dejo de nostalgia en su voz. Sin embargo, eso no significó retroceder. “Luego de las terapias de recuperación me ofrecieron jugar tenis y comencé a entrenar. Ese mismo año me invitaron a aprender esquí en la nieve y me gustó”. Su caso fue conocido por la “Fundación Andes Mágico” que lo instó a esquiar y aprender más las distintas técnicas de este deporte. Esta organización se creó el año 1999 en el centro de Ski Portillo, como resultado de un programa de rehabilitación para niños y jóvenes con diferentes discapacidades y de escasos recursos.
Gracias a los buenos resultados alcanzados en su travesía en el esquí el año 2014, la Reserva Huilo Huilo apoyó a Nicolás en su primera carrera representando a Chile y costeó su alojamiento en San Martín de Los Andes. “Este año queremos repetir esa experiencia, es un campamento que se organiza con otras personas con discapacidad. Nos queremos tirar desde más arriba”, relata el joven mientras espera la presentación de los autos del RallyMobil en la plaza Arturo Prat.
– ¿Qué te motiva a realizar esquí pese al accidente?
“Siempre me ha gustado el deporte y tenía que seguir entrenando. Cuando uno hace estas actividades está preparado para que pueda pasar algún accidente”.
– ¿Cómo fue la experiencia de acompañar a un piloto de rally en la vuelta de invitados del shakedown?
“Antes había participado en otro RallyMobil y con un corredor de Pichilemu. Me gusta mucho y sueño con ser piloto de rally”.
Nicolás cuenta que actualmente, junto con su familia, buscan auspiciadores para comprar el equipamiento adecuado para representar a Chile en los Juegos Paralímpicos de invierno que se desarrollarán el 2018 en Corea del Sur.
“Debe haber más apoyo al deporte nacional, estamos en un buen nivel y representamos a Chile a nivel mundial, se compite frente a los mejores. En mi caso necesito tener una buena silla de esquí. Este año se corre en San Martín de Los Andes en Argentina y luego nos vamos a Estados Unidos a participar en algunas pruebas”, cuenta Nicolás.
– ¿Cuál es tu consejo para otras personas que se encuentran discapacitadas por accidentes?
“Que salgan adelante, que busquen algo que les guste y los entretenga y lo hagan. No hay límites en la vida, todo se puede realizar”.
El piloto Felipe Álvarez, del Equipo Cerveza Valtor de Valdivia, se conmovió con la historia de Nicolás y lo invitó a ser su copiloto invitado en el shakedow: “Se trató de una grata experiencia, conocer su historia. Me emocionó el tema de cómo sufrió su parálisis a los 13 años, una edad súper importante. Ha sabido salir adelante con mucha fuerza. Su idea es llegar a correr el RallyMobil, le dije que tenía todo mi apoyo y que se comunicara conmigo para ver futuras carreras para ser navegante o ver alguna posibilidad de pilotear un auto. Es más que cualquier cosa, va más allá del rally. Nicolás es muy maduro y logrará muchas cosas. Su convicción es volver a caminar de aquí a 20 años más”.
Digno de imitar a sus pares y que la gente sin discapacidad aprenda de ellos