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El infortunio de Tadeo Rosselot en el comienzo del GP de Ovalle

El menor del clan Rosselot debió abandonar luego de golpear su coche durante la tercera prueba especial de la jornada, “El Cobre 1”, la que finalmente terminó siendo suspendida por la organización.

Una accidentada mañana vivieron los equipos que corren la tercera fecha del RallyMobil 2019 en las exigentes rutas de Ovalle, región de Coquimbo. Uno de los que lamenta su mala fortuna es el piloto de la R3, Tadeo Rosselot, último en salir en la prueba especial 3 (PE3) “El Cobre 1” antes que fuera suspendida por un accidente ocurrido en la PE2.

El más joven del clan Rosselot comenzó bien el trazado de la PE3 hasta que perdió el control de su Renault Clio R3 T para terminar estrellado en un muro de contención debiendo abandonar la jornada sabatina con la esperanza de reenganchar este domingo.

“Éramos los últimos que estábamos corriendo en la prueba y nos hicieron largar esa especial cuando ya veníamos con un desgaste de neumáticos más o menos importante, ya que habíamos pinchado en la PE 1. Pese a ello veníamos a buen ritmo, veníamos segundo en la R3 y terminamos cometiendo un error, ya que perdimos tracción en una parte sucia y nos fuimos contra un muro donde había harta gente pero bien ubicada en zonas altas”, recordó el joven piloto.

Tadeo añadió que como consecuencia del impacto “rompimos palier, rompimos una bandeja y creo que la homocinetica, así que frustrante pero los mecánicos están haciendo lo posible para mañana poder salir por los 10 puntos que aún están en juego”, explicó.

El piloto agregó que aún cuando ya había corrido la temporada pasada, está consciente que está en un periodo de aprendizaje.

“Estoy viviendo mi sueño de correr en esta disciplina y por lo mismo es una responsabilidad muy grande como tu vez con el copiloto, la familia y todos los auspiciadores que están detrás. Por lo tanto no es fácil llevar esto a resultados y es frustrante lo que pasó. Igual estamos tranquilos y sabemos que fue un error, pero que tampoco fue tan grave. Gracias a Dios no nos pasó nada”, dijo el menor del clan Rosselot.

Añadió que si bien no ha podido conversar mucho con su familia tras el accidente, su hermano Emilio, líder indiscutido de la R3, lo vio a un costado de la ruta mientras cubría un enlace, “paro en el lugar, me dio un abrazo, se aseguró que estuviéramos bien y siguió para adelante”, precisó.

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