Un difícil año ha vivido Luis Ignacio Rosselot este 2019 después de enfrentar diversos problemas en las tres primeras fechas del campeonato que le han impedido terminar las carreras. De ahí que en Quillón el experimentado deportista busca “agarrar un buen ritmo y sumar kilómetros” de cara a la segunda parte de la temporada.
Así lo reconoció el mismo Rosselot quien señaló que “hace rato que no ando en el auto de carrera. En Ovalle no fue mucho lo que pude andar y no he podido entrenar porque el motor me acaba de llegar, así que de a poco tengo que ir agarrando el ritmo”.
“Los principales problemas que he enfrentado con el auto son del motor producto de un vado. (También) un problema de alternador que tuve en la fecha del Mundial, y lo último que estaban malos unos inyectores”, explicó.
En ese sentido el piloto del Mitsubishi Mirage R5 ahondó en que “el problema lo generé yo, me comí un vado, rompí todo el auto adelante, no me di cuenta que había roto el intercooler y finalmente fue rotura de motor”.
Es por eso que Rosselot no esconde en que “ha sido un año complicado, pero estamos trabajando a full con el equipo para poder sacarlo adelante. De aquí en más debiésemos terminar las carreras y sumar puntos”.