La alegría fue a medias, muy sobria en el Citroen-Monster Pro Circuit Rally Team al finalizar la primera etapa del “Rally de Concepción”, segunda fecha del campeonato de Chile, que se disputó bajo un torrencial temporal de lluvia y que provoco muchos contratiempos al desarrollo del evento.
El fuerte aguacero no fue obstáculo para que Benjamín triunfara en esta jornada inicial con un trabajo sin fallas, mientras que su primo Samuel continuaba con su carrera ascendente para concluir en esta jornada nada menos que ubicado en el tercer lugar de la clase R-3. Pero la cuota de pesadumbre la entregó el doble accidente de Vicente, quien por lo deteriorado que resultó su auto quedó marginado definitivamente de la competencia.
Benjamín estaba muy contento y satisfecho, ya que su trabajo junto a su navegante Marcelo der Ohannesian tuvo sus frutos que desde el primer tramo se integró a la conversación por la vanguardia que la comenzó a consolidar desde los tramos siguiente al comprobar que con su ritmo se encaminaba al triunfo parcial con un manejo muy concentrado y sin cometer errores y especialmente superando los contratiempos del piso y barro por la lluvia a lo que sumaban los neumáticos con un compuesto que no era el más adecuado para las características de esta jornada.
El vencedor de la jornada señaló y calificó la etapa como muy difícil que pudo sortearla con una labor muy concentrada, superando los problemas del piso barroso y neumáticos con menor adherencia por lo cual supo adaptarse rápidamente y leer los problemas que ofrecía esta prueba. Para mañana indicó que debía de variar el rally con tramos nuevos que esperaba que aminorara la lluvia, pero en caso contrario tendría que adaptarse a las condiciones y tratar de conseguir una nueva victoria que esperaba alcanzar.
EL GRAN PROGRESO DE SAMUEL
Muy contento con su actuación estaba Samuel al concluirla etapa inicial con su tercer lugar que consideró que no estaba dentro de lo que tenía planificado. Estaba satisfecho con su accionar y entendimiento con su navegante Fernando Mussano con quien corría por primera vez.
El considera que ha sido una gran actuación, pero tiene claro que debe seguir aprendiendo y mejorando muchas cosas. Tuvo la cabeza fría para enfrentar la etapa con la labor en la cual estuvieron muy concentrados. Finalmente manifestó que los neumáticos no eran los adecuados que no se podía experimentar con compuestos lo que era muy peligroso para la integridad de los competidores.
LAS PENURIAS DE VICENTE
La ilusiones de Vicente comenzaron a quebrarse en el segundo prime de la etapa al volcar tras golpear un montículo interior de la curva, pese a ello con la parte trasera dañada continuó en competencia, pero definitivamente desertó al salirse en el kilómetro seis del cuarto prime.
Estaba bastante apesadumbrado al comentar que fue algo inesperado su volcamiento, pero sobre su salida indicó que al tomar una curva la derecha y al frenar se detuvo el funcionamiento del motor y el auto se trabo para patinar y desbarrancarse algunos metros. Indudable que el recuerda que había adelantado que lo neumáticos de compuesto duro no eran los adecuados para enfrentar estos caminos con lluvia y barro.
Algo que no solo afecto ya que por condiciones parecidas desertaron otros pilotos y Cristóbal Vidaurre volcó, pero continuó con un auto dañado y 15 minutos de desventaja y similar acción padeció el trasandino Alejandro Cancio, que pudo continuar. La clase R-3 sufrió la deserción de varios pilotos entre ellos el campeón Jorge Martínez al despistarse rompiendo un axial de la dirección; Emilio Rosselot al cortarse los pernos del soporte del motor, rotura del radiador y falla de la caja de cambios; Cristóbal Ibarra al romper una bandeja de suspensión a lo que se sumaron José Miguel Hernández y Manuel Brito.
Una jornada dura y exigente en la cual abandonó un tercio de los participantes, varios de ellos están trabajando intensamente para reenganchar mañana.